Lycocorax obiensis | Obi

El ave del paraíso de Obi, conocida popularmente como cuervo del paraíso de Obi, cuervo de Obi, o, ave del paraíso cuervo es una de las especies más singulares de la familia Paradisaeidae. Durante muchos años, el Lycocorax obiensis estuvo considerado una sub-especie del Lycocorax pyrrhopterus o ave del paraíso corvina, pero, debido a sus pequeñas características distintas, muchos especialistas la consideran ya una especie propia.

¿Cómo es el cuervo del paraíso o ave del paraíso de Obi?

El cuervo del paraíso, o, ave del paraíso de Obi, se caracteriza por su plumaje negro, con zonas brillantes en sus plumas que brillan en tonos azulados y verdosos. Destaca sobremanera su cola, formada por plumas de mayor tamaño que le permiten volar de manera frenética, maniobrar en el aire, y, que utilizan como timón en medio de las corrientes de aire.

Por otro lado, los ojos tienen tonalidades cambiantes, con colores que van desde el rojo escarlata hasta el azul cielo. Sus patas poseen garras para posarse en las ramas altas de los árboles, en las cuáles pasa la mayor parte del tiempo, alimentándose y avistando posibles presas.

¿Cómo es el hábitat de este cuervo del paraíso?

El ave del paraíso Lycocorax obiensis, como su propio nombre científico indica, vive en las islas de Obi, uno de los lugares más emblemáticos del territorio de las aves del paraíso. Las zonas predilectas para el hábitat y avistamiento de estas aves se sitúan en los bosques tropicales y selvas por encima de los 1200 metros de altitud.

El canto del ave del paraíso cuervo de Obi

¿Cómo es la vida del Lycocorax obiensis?

Se trata de un ave que vive principalmente de manera aislada, un ave solitaria que se junta ocasionalmente para crear asociaciones. Su alimento predominante se basa en frutas y semillas, aunque también puede cazar pequeños insectos, artrópodos y otros invertebrados que encuentra en los árboles o el suelo de los bosques. Este ave forma sus nidos con musgo, hojas, enredaderas y trozos de ramas, colocándolo en las copas de los árboles, y, llegan a incubar varios huevos en cada nidada.